martes, 13 de noviembre de 2018

FAUVISMO





El fauvismo: definición, características y representantes





De entre todos los –ismos que surgieron en la primera década del pasado siglo XX, puede ser el que menos duró, ya que se inauguró con una exposición en 1905 y para 1910 se encontraba totalmente agotado. Eso no quita para que las obras que se hicieran en ese periodo pusieran las bases del arte posterior y para que entre sus filas debutara un creador de la talla y la trascendencia como fue el francés Henri Mattisse (1869-1954). Pero vayamos por partes, ¿qué entendemos por fauvismo?, palabra que literalmente, remite a un mundo de “fieras”, tal como lo definió el crítico Louis Vauxcelles.






Características del fauvismo


El fauvismo tiene sus raíces en la obra del post-impresionista Gauguin. Es un movimiento eminentemente pictórico e, incluso, si queremos perfilar más, centrado en pinturas al óleo. Se caracteriza por: 
Uso del color según la técnica de divisionismo. Es decir, los tonos no se mezclan en la paleta. Se colocan puros en el cuadro uno al lado del otro. Las primeras obras presentan, por ejemplo, en el rostro humano colores rojos, verdes o morados que, en principio, es ajeno a la carnalidad. 
Los contornos se presentan marcados, incluso con una línea gruesa de color negro y nada más tenemos que observar, por ejemplo, Desnudo azul (1907) de Henri Matisse. 
Rechazaban de forma unánime el concepto de belleza tradicional. El canon se sustituyó por la libertad expresiva. Hay que recordar que Freud acababa de definir el inconsciente con lo que esto supuso de revulsivo en la vida intelectual de entonces. 
Admiraban las expresiones artísticas de África y Oceanía a través de un incipiente comercio de arte que empezaba a despuntar en los elitistas círculos de París. Las máscaras, los roleos de tatuajes y la desnudez de estas culturas fascinaron a estos artistas. 
Se elimina la perspectiva, los claroscuros y, en estadios avanzados del movimiento, se reduce al mínimo el “decorado” de los cuadros. La luz llega de los colores, pero no del juego de las sombras. 
Las formas se simplifican y se recurre a lo natural, a lo primitivo e instintivo. 
Con el solo uso del color se intenta captar los sentimientos. Para ello se utiliza el simbolismo de los objetos. 





Por supuesto, estas características se dan de forma particular y peculiar en cada uno de los artistas más señeros del movimiento.
Artistas del fauvismo

Kasemir Melevitch, que luego evolucionó hacia la abstracción, es el representante ruso de mayor proyección. En Francia, donde el movimiento surgió y prosperó, fue abrazado por Georges Braque, Raouel Dufy, Georges Rouault o Albert Marquet .Sus representantes más ilustres te los reseño a continuación. 

Henri Matisse 

Figura indiscutible del arte del siglo XX, junto con Picasso, puede decirse que el fauvismo comenzó con Luxe, Calme et Volupté, (1904). Aquí el pintor francés, con técnicas cercanas al puntillismo, nos presenta un paisaje de colores planos totalmente alejado de la realidad extra-textual.





La obra de Matisse, claramente reconocible, nunca abandona los principios del movimiento. Es plástica en sentido extremo. Las figuras son planas. Se prima el color, incluso, con un uso exagerado. Los elementos meramente decorativos son eliminados de la composición pictórica para centrarse en objetos o representaciones humanas impregnadas de un fuerte carácter simbólico.



El color es tan consustancial a la obra del francés que, a mediados de la década de los años veinte, su opus evolucionó hacia la abstracción. Matisse colaboró, además, en la edición de grandes obras de bibliofilia como las realizadas por la editorial Skira.

André Derain 


Controvertida a más no poder fue la vida y la producción de André Derain (1880-1954) quien, además, de la pintura manejaba el lenguaje de la escenografía, la danza y el atrezzo. 



Su evolución, al contrario que Matisse, no es considerada como “lógica y natural” por parte de la crítica, ya que a mediados de su carrera vuelve a hacer una pintura calificada como tradicional. Derain, dotado de una gran inteligencia, era un espíritu rebelde y, probablemente inseguro. Muestra de ello fue la destrucción de su mano de gran parte de su obra primera.


Maurice de Vlaminck 

El menos conocido de este grupo el también francés Vlaminck (1876-1958) acusa un clara sustrato inter-textual (palabra académica para, más o menos, referirse a influencia) de Van Gogh. De hecho, sus coloridos paisajes pueden confundirse con la estética del pintor holandés. Su obra se centra en la naturaleza, en las tareas del campo y alguna que otra vez hace retratos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

SURREALISMO

Surrealismo  El término Surrealismo es de origen francés y quiere describir el ir más allá de la realidad, se aplica a la literatura ...